domingo, 31 de julio de 2016

Max, más allá del presente

Max
Max es una chica muy inteligente que se ganó una beca para estudiar en una prestigiosa universidad de Oregon, Estados Unidos. Su sueño es ser una gran fotógrafa.
                            
En este lugar va a encontrar a memorables personajes, cada uno con una personalidad increíble, está Victoria, la típica chica hermosa con delirios de grandeza, ella cree ser la reina del lugar y no desperdicia ni el más mínimo segundo para hacer sentir inferior a cualquier persona que se le atraviese. Está la versión masculina de Victoria, un patán que cree que todos sus deseos serán cumplidos y si no arma un berrinche de proporciones enormes, hasta el punto de que el rector de la Institución se hace el de la vista gorda cada que él hace sus fechorías.


También está la chica super inteligente, pero con graves problemas de depresión, llegando así a pensamientos suicidas, también está el chico que cree que todas las mujeres están locas por él, causando más lástima o fastidio que otra cosa.

Max vive en este ambiente, tiene grandes conflictos con estos personajes y cada rato se enfrenta a decisiones que van a cambiar por completo su destino y el de los demás.

Pero lo que nadie sabe es que Max es especial, Max puede viajar en el tiempo, al pasado mejor dicho, ella comienza a darse cuenta de su gran poder, se da cuenta que cada error que cometa lo puede depurar volviendo al pasado y también se da cuenta que puede llegar a ser una heroína, que ayuda a las personas en su entorno.

¿Qué tan ético es volver al pasado a reparar algo malo que uno hizo, y mucho peor, si se utiliza para hacer el mal?

Es como querer jugar a ser Dios y con su más preciado elemento, el tiempo.

Siempre hay que tener en cuenta que todo lo que uno causa tiene una reacción y si uno resuelve algo puede empeorar otros factores.

Me parece que lo mejor es dejar el pasado atrás y tener el valor de asumir las consecuencias de nuestros propios actos.

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